En la actualidad, disponemos de cuantiosas cantidades de información procedentes de cualquier canal o parte del mundo. La confluencia de culturas y la constante comunicación entre los países, ha convertido a la sociedad en un grupo global en el que todo se encuentra interrelacionado.
Cada día recibimos multitud de noticias provenientes de todas las partes del mundo, accedemos a información y nos comunicamos con personas que se encuentran fuera del alcance de nuestro idioma y nuestra cultura.
Esto no sería posible sin la traducción.
La traducción nos permite llegar a todas partes. Si lo analizamos en términos de mercado, entendemos que el mercado actual es global. Esto significa que gracias a la traducción, se puede superar la barrera idiomática y es posible llegar a mercados internacionales.
El importante papel que juega la traducción en nuestras vidas, sumado al avance de la tecnología en las últimas décadas, ha provocado una unión, casi una fusión, entre estas disciplinas, que tiene como resultado la tecnología de la traducción, es decir, el uso de herramientas de software para mejorar el proceso de conversión de un texto escrito en un idioma a otro.
Esto surge de la necesidad de obtener servicios de traducción mejores y más rápidos, y ha desembocado en todo tipo de tecnologías de la traducción, siendo la que tiene la mayor proyección la traducción automática o Machine Translation (MT).
Sin embargo, ¿es ésta la opción perfecta para sincronizar eficacia y calidad del lenguaje? ¿hacia dónde se dirige el futuro de la tecnología de la traducción?
En primer lugar, aclaremos el concepto de traducción automática: se entiende como el proceso automatizado de traducción, de un idioma A a un idioma B, sin la ayuda o intervención humana.
Su origen se remonta a la Segunda Guerra Mundial, cuando el interés por traducir y descifrar los mensajes del bando contrario era la prioridad absoluta. En el año 1949, la Fundación Rockefeller, con Warren Weaver (criptógrafo) como protagonista, comenzó a desarrollar las primeras hipótesis que implicaban el uso de ordenadores en el proceso de traducción.
Los siguientes años, diferentes universidades comenzaron a desarrollar estudios sobre la nueva disciplina del momento. No fue hasta el año 1954, que se presentó el primer prototipo IBM en la Universidad de Georgetown. Se trataba de un sistema que era capaz de traducir 49 oraciones y tenía implementadas 6 reglas gramaticales.
Con este prototipo se generó un gran interés, que se sigue conservando hasta la fecha.
La tecnología de la traducción no se limita solo a la MT, también abarca otras herramientas como: las memorias de traducción, tecnologías de interpretación virtual, tecnologías de voz a texto y herramientas de gestión de terminología.
Sin embargo, la traducción automática acumula un gran éxito como herramienta de traducción, debido a su menor dependencia de la acción humana.
Desde que se creara la Machine Translation, podemos distinguir tres tipos:
Este tipo de traducción automática se basa en un motor que analiza la sintaxis de la lengua de origen y se vale de reglas lingüísticas y diccionarios para traspasar el significado a la nueva lengua.
Las traducciones se generan de acuerdo a modelos estadísticos, a partir de un corpus de textos bilingües. Esto significa que funciona tomando como referencia otros textos traducidos que se han introducido previamente.
Cuando apareció la Traducción Automática Neuronal (TAN), el sector de la tecnología de la traducción dio un salto exponencial. Este tipo de traducción automática utiliza inteligencia artificial (IA) para generar traducciones.
Este salto tecnológico supuso un cambio en la traducción automática. El mecanismo intenta imitar el pensamiento de un traductor humano para ofrecer el resultado más acertado.
El motor aprende de traducciones anteriores y predice lo que está por venir. No se limita a traducir palabra por palabra, sino que puede comprender oraciones completas y el contexto de los párrafos.
Este avance generó mucho interés para traducir grandes volúmenes de palabras, así como, para traducir documentos comerciales muy estandarizados.
Sin embargo, no es un proceso perfecto… todavía. El uso de esta nueva herramienta de la tecnología de la traducción aún produce ciertos defectos, como pueden ser: poca legibilidad, algún desliz con las partículas negativas, términos no adecuados para el contexto, etc.
No se debe olvidar que se trata de un sistema tecnológico en vías de perfeccionarse, no de un profesional humano.
La traducción automática, como se comentaba anteriormente, presenta ciertos inconvenientes al tratar con ciertas tipologías textuales. Sin embargo, para los textos con menor complejidad lingüística, resulta una solución altamente eficaz y rentable.
Algunas de las ventajas de la traducción automática son:
De todos modos, hay que tener en cuenta el propósito que se persigue con la traducción, ya que la traducción automática puede no ser lo más conveniente.
La MT tiene un largo camino por delante en el que se está progresando a gran velocidad. Es cierto que la mejora de esta tecnología de la traducción ha supuesto un abaratamiento de costes para ciertos proyectos, pero se deben de tener en cuenta las limitaciones creativas de esta herramienta.
Lo idóneo es que, una vez utilizada la herramienta de traducción automática, un profesional de la traducción realice un proceso de posedición y revise los textos.
A fin de cuentas, hay ciertas necesidades de traducción a las que solo les puede hacer frente la sensibilidad humana.
Probablemente, con el paso del tiempo, podremos ver cómo cambia el balance y pasaremos en muchos casos de hablar de traducción humana asistida por computadora a utilizar el concepto de traducción por computadora asistida por humanos.
Como ves, hay múltiples tecnologías de traducción y éstas ya son indispensables en el trabajo de traducción diario. La cuestión se encuentra en elegir adecuadamente la que se adapte mejor a tus necesidades.
Esperamos que este artículo te haya resultado de ayuda, puedes encontrar más en nuestro blog. Puedes informarte de nuestros servicios de traducción y si necesitas asesoramiento de una empresa de traducción, no dudes en contactar con nosotros.